Montréal
Señor Presidente de la República
Ricardo Lagos Escobar
La Moneda,
Santiago, Chile
Su Excelencia,
Las organizaciones abajo firmantes adhieren al contenido de la carta que le fuera enviada el año recién pasado por diversas organizaciones Chilenas junto a 18 mil firmas, con la cual se refrendaba la amplia y gran preocupación que suscitaba la posibilidad de que el gobierno aprobase el proyecto minero Pascua-Lama. Hasta hoy, esta eventual aprobación nos sigue preocupando. La oposición a este proyecto no ha hecho sino crecer.
El conflicto pone en juego los intereses de una gran trasnacional frente a los intereses inmediatos de la población de la hoya hidrográfica del río Huasco, y de la nación en su conjunto. Los daños inmediatos a preveer para toda la población, causarían por una parte la pérdida de acceso tradicional al recurso muy escaso que es el agua (tanto en su caudal como en su calidad). Y por otra, la mina se encuentra ubicada en una localidad donde persiste un litigio no dirimido en cuanto a su propiedad y que reclama una comunidad diaguita. Según todos los afectados la compañía minera no ha aportado hasta hoy, año 2006, ninguna solución fundamentada y convincente a sus reclamos. Sin embargo las entidades gubernamentales que por vocación debieran velar por los intereses locales y nacionales han tratado a los inversionistas con gran condescendencia. Nos inquieta que no haya existido un debate nacional sobre este conflicto, y que su fácil aprobación genere más solicitudes similares de parte de las transnacionales.
Nos preocupa también que la nación no disponga aún de información acerca de los beneficios que obtuvo después de más de 10 años de explotación de la mina de oro "El Indio" en la región de Coquimbo, también explotada por Barrick Gold. ¿ Cuál fue el balance social, económico y ambiental de la explotación de esta mina? ¿Y cuál ha sido la lección política que ha dejado para el buen manejo del patrimonio nacional? Estos balances debieran ser obligatorios y públicos para toda empresa extranjera que llega al término de su concesión de explotación.
Estamos conscientes del complejo y pernicioso pasado histórico reciente de Chile que permitió la privatización del Area Estatal de la economía durante la dictadura. Esto fue un enorme despojo del patrimonio nacional realizado gracias a la falta de controles institucionales y a un régimen de represión brutal que excluía toda consulta a la ciudadanía. Esperamos que más pronto que tarde se estudie en profundidad las irregularidades que permitieron el rápido y bochornoso resultado de esas privatizaciones, y buscar como corregir estos daños ocasionados a la nación.
Y con la esperanza que los gobiernos puedan practicar un "Nunca más" de tales prácticas es preciso que se exija transparencia política y consecuencia cívica en las negociaciones de proyectos que comprometen a la nación. Numerosas iniciativas han sido tramitadas y aprobadas sin una consulta a la ciudadanía a pesar de su profunda repercusión social. Citamos aquí algunos temas ligados a Pascua-Lama: el Tratado minero Argentina – Chile, el código minero, el código de aguas, la reforma tributaria que rige para las mineras extranjeras, entre otros. Estos instrumentos legales están imbuidos de un pensamiento injusto y rapaz, donde los intereses del ciudadano común y el pequeño empresario carecen del debido resguardo, donde se abdica la necesaria protección del medioambiente en cuanto al uso del recurso nacional pero donde en cambio se aporta el máximo de garantías al gran capital y a los intereses extranjeros. Sencillamente, instrumentos que si bien pueden reclamar ser legales, no dejan de ser ilegítimos. Nuestros esfuerzos por superar el legado perverso que nos ha dejado la dictadura nos llaman a reconocer y superar los errores y omisiones que se hayan podido cometer, ya que es la única forma para poder refundar el nuevo Chile democrático para el beneficio de todos.
Mirando ahora hacia el futuro que pronto celebrará el segundo centenario de la nación, e incluso más allá, creemos que nuestros proyectos deben centrarse en la gente, y en sus aspiraciones como sociedad con valores humanos de participación y de solidaridad. El crecimiento económico del país debe ser una de la funciones para cumplir con tales aspiraciones, en lo posible en amplia colaboración con las naciones vecinas y los países amigos que comparten estos anhelos. Pero las personas no deben estar sometidas al imperio de la economía, es la economía la que siempre debe estar al servicio de la comunidad.
Y esto nos lleva a preguntarnos sobre el problema de las inversiones extranjeras. El discurso usual de los gobernantes es insistir sobre la gran necesidad de darles acogida, y hasta de la necesidad de sacrificios que deben hacerse para retenerlas o aumentarlas. Sin duda que en alguna medida son necesarias pero eso no implica que los gobiernos renuncien a su papel de fiscalizador de las concesiones y a la protección de los intereses ciudadanos. El Estado no sólo debe supervigilar estas concesiones sino que debe tener los elementos para evaluar tanto los beneficios que dejan las inversiones como los posibles daños que ellas ocasionen y que deben repararse. Sin una política clara sobre esto se corre el riesgo que caer víctima de la voracidad de los grandes consorcios.
Señor Presidente, consecuente con la argumentación aportada más arriba somos partidarios que el proyecto Pascua Lama no sea aprobado hasta que se cumpla con una revisión exhaustiva de los mecanismos y negociaciones que le han permitido llegar hasta esta etapa decisiva, sin que la comunidad afectada haya sido debidamente consultada y escuchada. Nuestra posición no excluye que este yacimiento pueda ser explotado cuando en el futuro se cuente con estudios imparciales rendidos públicos. Y que ellos demuestren que será para el beneficio nacional, sin daño para los productores y habitantes locales, y respetando las normas que Chile haya fijado para protejer su medioambiente y su habitantes.
Confiando en vuestro compromiso con todos los Chilenos y en vuestras dotes de gobernante, las organizaciones canadienses de solidaridad internacional y de chilenos canadienses agradecen la acogida que Ud. brinde a esta petición y firman por el rechazo del proyecto.
Atentamente,
Gerardo Aiquel (Grupo de Trabajo –Campaña Oposición al Proyecto Pascua Lama) courriel : [email protected]
15, Rue de Castelnau O., Montréal, Québec H2R 2W3, Canada
Firman : Organizaciones de cooperación internacional
- Association Québécoise des organismes de solidarité internationale (AQOCI)
- Centre de femmes d’Ici et d’Ailleurs (Montréal)
- Consejo central de Montréal métropolitano (CCMM-CSN)
- Fédération des femmes du Québec
- Fundación Bolivariana de Canada (FBC) Daniel Araujo
- GREENPEACE-Québec
- L’Entraide missionnaire (Montréal)
- MiningWatch Canada
- NGO-VIDAU ; Vida autonóma, Cooperación y Desarrollo
- Québec Solidaire
- Sindicato CSN construcción (Montréal)
- Social Justice Committee (Montréal)
- SUCO (Montréal)
Organizaciones canado-chilenas
- Asociación Cultural Araucaria (Montréal)
- Asociación de chilenos de Montréal (Montréal)
- Casa Salvador Allende (Toronto)
- Centro Cultural Pablo Neruda (Québec)
- Comité Chileno por los Derechos Humanos de Montréal
- Comité de Solidaridad Internacional (Montréal)
- Grupo de Trabajo –Campaña Oposición al Proyecto Pascua Lama
- Profesionales, técnicos y artistas chilenos (PROTACH) Montréal
- Proyecto Cultural Sur (Montréal)